DÍA MUNDIAL DE LA SALUD
- Ante el incremento de patologías mentales en los más jóvenes, Proyecto Hombre Madrid incide en la importancia de prestar atención y atender la salud mental de los menores y adolescentes.
- El acceso a la pornografía y el uso inadecuado de redes sociales son las principales preocupaciones de los profesionales de Proyecto Hombre Madrid en jóvenes.
- Asesorarse y realizar una intervención temprana es esencial para evitar una mayor cronicidad. Todas las personas que deseen información, pueden escribir al correo electrónico a info@proyectohombremadrid.org o llamar al 638155383 / 915420271.
Domingo, 7 de abril de 2024 – Ante el incremento de patologías relacionadas con la salud mental de los más jóvenes, Proyecto Hombre Madrid se une al Día mundial de la salud con el objetivo de incidir en la importancia de prestar atención y atender el bienestar mental de los menores y adolescentes.
Se estima que en España cerca de un 25% de los adolescentes presenta síntomas de depresión moderada, más del 15% síntomas de ansiedad grave y cerca del 5% ha intentado quitarse la vida. Son cifras muy elevadas que evidencian la importancia de cuidar la salud mental de los jóvenes identificando comportamientos o síntomas que indican que detrás puede haber un problema psicológico que debemos tratar con un profesional.
Desde el servicio de asesoramiento y tratamiento a menores, jóvenes y sus familias de Proyecto Hombre Madrid, se incide en la importancia de abordar aquellos aspectos que más preocupan a los jóvenes, que tantas consecuencias tienen en su salud mental, y que quizá, debido al salto generacional, nos cueste más identificar y/o gestionar como adultos.
Acceso a la pornografía
12 años es la edad media en la que los menores acceden a la pornografía en España. Según el Plan Nacional Sobre Drogas, el 29,4% de los menores entre 14 y 18 años consumen este tipo de contenido de manera semanal, y en la mayoría de los casos lo hacen a través de plataformas gratuitas donde cerca del 90% de las escenas son agresivas o violentas.
La capacidad crítica y de comprensión de los menores, debido a su momento madurativo, no es suficiente para entender y procesar adecuadamente estos contenidos, lo que dificulta la adquisición de una sexualidad sana y no agresiva en edades adultas, así como relaciones afectivas saludables, y normaliza algunas prácticas no satisfactorias o de riesgo. Con frecuencia, este consumo a edades tempranas provoca falta de autocontrol, consumo impulsivo, adicción a este contenido y/o al sexo, y/o disfunciones sexuales, entre otros. También hipersexualización, malestar psicológico por la presión de seguir ciertos roles o realizar prácticas no deseadas, trastornos del estado del ánimo, etc.
Es importante acercar a los más jóvenes una educación sexual adecuada que les permita hacer frente a la influencia de la pornografía actual. La formación e información es el recurso que tenemos para acompañarles, para que puedan entender el contenido que consumen, diferenciar entre realidad y ficción, y que seamos capaces de establecer unas pautas acordes a su edad que les permitan tener una sexualidad adecuada.
Uso inadecuado de redes sociales
Según estos datos, el 97% de los menores entre 14 y 18 años utiliza internet como medio de ocio, siendo un 23,5% los que realizan un uso compulsivo. En Proyecto Hombre Madrid, el 10% de las demandas de tratamiento recibidas están relacionadas con este uso inadecuado de las pantallas.
El impacto que las redes sociales tienen en la vida de los menores, si no se realiza un uso adecuado de las mismas, es elevado. No están preparados para diferenciar entre lo que es real de lo que no lo es. Existe una sobreexposición que les lleva a comparar su estilo de vida y su físico, entre otros, con el de los demás, y a tener una gran presión por asemejarse a esos patrones inalcanzables. El uso de filtros de belleza e incluso la creación de perfiles utilizando inteligencia artificial también tiene un gran impacto sobre su autoestima repercutiendo en su comportamiento y estado de ánimo.
Es importante que los menores sepan realizar un uso adecuado de las redes sociales. Se deben establecer límites, tanto de horario como de contenido, y sobre todo, deben estar informados y acompañados para ser capaces de entender lo que están viendo.
Con frecuencia los adultos tenemos dudas sobre cómo abordar estos temas con nuestros hijos e hijas, sobre si lo estamos haciendo bien o si quizá no estamos siendo capaces de identificar posibles conductas que puedan dañar su salud mental.
Desde Proyecto Hombre Madrid ofrecen un servicio de asesoramiento y tratamiento a menores, jóvenes y sus familias, en el que resolver estas dudas y abordarlas junto a profesionales. Si crees que necesitas asesoramiento, llama al 638.15.53.83 o 91.542.02.71, o escribe un correo electrónico a info@proyectohombremadrid.org.